domingo, 20 de diciembre de 2009

32356

La Navidad no empieza ni con las luces, ni con los anuncios de juguetes, ni con los de perfumes ni cuando lo dicta el comercio. La Navidad comienza el día de la lotería. Con la cantinela de los Niños dejas todo lo que estás haciendo y ya seguiremos después de Reyes. Y como todo el mundo hace lo mismo pues se establece una tregua. Quizá sea el único periodo en que se puede estar verdaderamente tranquilo. Soportando a parientes, propios y políticos, pero tranquilo.

Vuelvo a titular la entrada como todos los años. Éste es el número que jugamos la cuadrilla de amigos en el secarral. Siempre nos llamamos y nos citamos el día veintidós para festejar el Gordo. El que no tiene una limusina en la puerta esperando para acudir a la cita tiene un helicóptero o tiene a la VI Flota. Nadie duda de que vaya a tocar. Luego no toca (incomprensiblemente) y nos giramos a Miguel, que es nuestro proveedor y sin embargo amigo y sin embargo odiado y le decimos de todo: que si es un cenizo, que si ese número no existe, que cambie de número, que nunca jamás le vamos a volver a comprar y otras lindezas similares.

Con todo, y a pesar de todo, la lotería siempre es agradable, y eso que nunca toca, y como es el arranque de la tregua, pues digamos que es hasta entrañable. Y divertida desde que los Niños de San Ildefonso se llaman Onedollar o Steven del Rocío.

Pero esto fue así hasta el año pasado.



No sé si llamarlo ironía. No sé si llamarlo sarcasmo. No sé si llamarlo crueldad. Cuando la fortuna se burla de ti de esa manera pues mandas todo a hacer puñetas y bajas los brazos. Sí, me sentó mal. Sí, considero que el dinero no da la felicidad pero, como diría Woody, proporciona una sensación muy parecida y apenas distinguible de la original. Sí, es verdad que la lotería no te retira, que no te permite comprar todo tu tiempo, pero sí una buena parte. Así que, como todo aquel que ha sido contrariado por la fortuna me he vuelto un resentido, un amargado. Reniego de la lotería. Es más, afirmo que no existe, que es una gran mentira. El Gran Súper Ser Maligno decide al azar unas cuantas localidades, se manda allí a unos pocos actores (si alguien se molestase en comprobarlo vería que año tras año son los mismos) que se dedican a hacer el memo y el ridículo abrazándose, riéndose sin ganas y tirándose champán unos a otros (gran bebida el champán, que sólo sirve para ser agitado y tirado) delante de las cámaras de televisión y una vez se apagan éstas se cierra el chiringuito y cada uno a su casa y los demás que si la salud y que si la madre que lo parió. Así que este año, no. Este año no participo. Este año proclamo que la Navidad comienza el día veinticuatro. Y ya está. Y sanseacabó.

Lo que no sé es cómo, a pesar de la incontestabilidad de mis argumentos, Miguel me volvió a engañar. Sí, en el cajón está el 32356. Y, si, hemos vuelto a quedar todos para el día veintidós. Y, sí, ya tengo el helicóptero alquilado.

10 comentarios:

Alex Maladroit dijo...

Que da igual, hombre, que da igual, la gracia es depender de un trozo de papel todos los años.

Arual dijo...

Jajaja, la loteria es mentira y los reyes son los padres, pero la ilusión vuelve cada año por estas fechas o no???

Slim dijo...

suerte, entonces, con tu numero, a ver si este año aciertas!

ya he visto lo de Nixon...que honor! y que es Cuaderno 10? y que hace tu entrada ahi?

GARRATY dijo...

Al menos algo pillaríais de la centena del gordo.

Yo que tú este año no jugaba, mas que nada porque es científicamente imposible que toquen dos números tan parecidos tan seguidos. No lo digo por desilusionarte, que conste.

Por cierto, consultar la lista de premios en internet es muy sencillo pero no hay nada comparable a buscar los números, papeleta a papeleta, en el listado que sale en los periódicos. Eso sí es una tradición navideña.

cuaderno10 dijo...

Pues aquí tienes una participación en el número de Cuaderno10. Este año el gordo termina en 10, querido Cariacontecido. Te la envío por correo electrónico pues no creo qe hoy vayas a pasar por la redacción con la que está cayendo.

Slim, www.cuaderno10.com, es una revista de literatura en la que El Impenitente, bajo seudónimo, firma una columna titulada Filo Ocular dentro de nuestra sección de Opinión. Excuso decir que es la columna estrella, la que da sentido a toda la revista y la que nos proporciona más visitas. ESte fin de semana, gracias a la recomendación de Nixon, 150 personas han leído su texto acerca de El Niño Gusano.

Igual que leéis al Cariacontecido en este blog debéis leerle en Cuaderno10. Aquí y allá nunca decepciona.

Juan Rodríguez Millán dijo...

¡Por fin alguien que recuerda que las Navidades antes empezaban con la lotería! Y con el fin de las clases, claro...

Suerte mañana. Yo este año creo que es el primero en el que no juego absolutamente nada. Pero nada.

Slim dijo...

ah pues me apunto el enlace de la revista, gracias!
impenitente-caracontecido no me habia enterado de que publicabas en una revista, estoy un poco dispersa ultimamente. que guai ;-)

El Impenitente dijo...

¿Que los Reyes son los padres? Eso no verdad y cuando quieras te lo demuestro.

Yo ahora primero compruebo los números por internet y, después, lo hago en el periódico, que es más fiable.

El día en que Cuaderno 10 se libre de mí multiplicará por veinte su número de impactos. Mientras tanto me permiten demostrar regularmente lo quiero y no puedo que soy. Y el caso es que tengo más lectores en el portal que los que nunca supongo que tendré en el blog (aunque realmente no sé ni quiero saber cuántos leen este blog. No quiero ni contadores ni similares. No se trata de eso).

Aún así, y como siempre, muy agradecido, estimada directora.

Palitos Candela dijo...

Pues te han tocado 5 euros por cada euro jugado.
¡Enhorabuena!

El Impenitente dijo...

Pues sí, nos ha tocado la pedrea. Por lo visto el número existe. Si lo llego a saber invierto todos mis ahorros. Una rentabilidad del quinientos por cien es muy interesante.