Máquina, Patrón y supervivencia

Esta máquina de la foto da fe de que somos una generación de supervivientes. Está la máquina situada en una explanada junto a la Escuela y era en esa explanada donde se celebraba la fiesta del Patrón. Era muy popular aquella fiesta en todo Valencia puesto que se celebraba el día anterior al comienzo oficial de las Fallas. Era tan importante como la plantá. O más. Y era el único día del año en el cual se veían chicas por la Escuela. La fiesta la organizaban siempre los estudiantes de último año y así sacaban fondos para el viaje de fin de carrera. Se hacían paellas. Y bebíamos. Traían siempre alguna Discomóvil. Comida, bebida, música y chicas. ¿Necesitábamos algo más? Sí. No había Patrón completo si no terminábamos encima de la máquina. Estaba prohibido. Siempre advertían. Siempre amenazaban. Nos daba igual. La tradición era la tradición. Y nos subíamos. Nunca nos caímos. Nunca nos pillaron. O miraron a otro lado. Quizá por nuestra culpa se llevaron la fiesta del Patrón lejos de la Escuela. Tuve suerte de no vivir ya eso. De vez en cuando me paso a saludarla. Mis rodajes suelen visitar el Politécnico y, una vez allí, me acerco. Parece que sestee. No creo que nos recuerde. Pero siempre sonrío al verla. Porque qué bien lo pasamos allí. Qué bien lo pasamos.