domingo, 1 de octubre de 2017

For once in my life

“For once in my life” era una canción entrañable. El chaval está contento. Ha ligado (por primera vez en su vida), se siente feliz y lo canta a los cuatro vientos. Fenomenal, oye, y nosotros bien que nos alegramos por ti. Ya nos la presentarás. Eso fue hasta que llegó Stevie Wonder y convirtió una canción entrañable en una canción devastadora envuelta en un celofán que le da una apariencia inofensiva (mis canciones favoritas). Porque cuando Stevie Wonder canta –por primera vez en mi vida tengo a alguien que me necesita- piensas –menos mal. Porque hay que ver lo que ha pasado este muchacho. En la voz de Stevie esta canción es un triunfo después de mil derrotas, es la luz tras el diluvio, es coronar un ocho mil después de diez intentos fallidos y dieciséis compañeros muertos, es ganar la Champions tras haber perdido tres finales. Es un verdadero himno a la autoconmiseración y eso, para un seguidor de la Gran Medusa que tiene a la autoconmiseración, al desencanto y al sedapenismo por encima de la fe, de la esperanza y de la caridad, hace que “For once in my life” se eleve a hors catègorie. Aunque, por otra parte, pienso que esta versión tiene tanta fuerza que podría con cualquiera, aunque no simpatice con la Gran Medusa. Puedo perfectamente imaginarme a Hugh Hefner (que en paz descanse (de una vez)) cantando -For once I can say, this is mine, you can't take it. As long as I know I have love, I can make it. For once in my life I have someone who needs me- con los ojos vidriosos y creyéndosela a pies juntillas. Y a Kim Yong-un y a Mike Tyson. Y esto no está al alcance de cualquiera. Stevie, que eres uno de los grandes es una evidencia. Y que figuras en el santoral de los granmedusitas, también.

2 comentarios:

Sierpe dijo...

No canta. Su voz es ambrosia.
En el OLIMPO sin duda, junto a otros muchachos y el triunvirato femenino(Ella, Aretha,Billie) no necesariamente en este orden

El Impenitente dijo...

Totalmente de acuerdo, Sierpe. Y yo le daría un accésit a Simone.