Alejo llegó pronto aquel día a casa. Sabía que su mujer, M. y el pequeño A. tardarían en llegar. Era su oportunidad, pensó. Alejo tenía una ilusión oculta, inconfesable: quería rodar una película porno. Y se puso manos a la obra. Él iba a ser el director de la película, el subdirector, el guionista, el responsable de la escenografía, de la iluminación, de la fotografía, el maquillador, el operador de cámara y también iba a ser el único actor. Mucho trabajo. Colocó, iluminó, maquilló, ensayó y, al cabo de un rato, estaba preparado. Gritó luces. Gritó cámara. Gritó acción.
Filmó la película en una sola toma, en un plano secuencia superior en duración al de “Sed de mal”. Recogió todo muy bien recogido y se puso a revisar la filmación. No le gustó. Tal vez el guión le pareció poco consistente. Tal vez los diálogos no eran creíbles. Tal vez el actor único estaba un tanto sobreactuado. Tal vez sintió una vergüenza horrible. El caso fue que no le gustó y borró la cinta.
Ese mismo día, o muy poco después, M., madre primeriza ella, vio al pequeño A. haciendo zalamerías y no pudo resistirse. Cogió la cámara y empezó a filmar. -Pero qué guapo es mi niño-decía. –Cuánto voy a presumir yo de mi niño-decía.
M. había quedado con un grupo de amigas en casa de una de ellas. Por supuesto que se llevó la cinta que había grabado con todas las gracias de su pequeño. –Vais a ver qué preciosidad de niño tengo-decía. -Lo vais a ver-. Y metió la cinta dentro del vídeo.
La calidad de las grabaciones de aquella cámara es desconocida. Lo que sí es sabido es que, al darle al botón de borrar, no lo hacía desde ese mismo instante sino que tenía un retardo de segundos. ¿Cuántos? Los suficientes. Cuando M. apretó el play quien salió en aquella pantalla de televisión en aquel salón lleno de mujeres no fue A. haciendo monerías. Fue Alejo. Haciendo monerías.
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12 comentarios:
Jajajaja!! En mi pueblo paso algo parecido pero a escala más mediática. Un jovenzuelo se grabó masturbándose con la cámara de vídeo de su padre que justamente era el encargado de hacer las grabaciones del pregón de fiestas en agosto para el canal de tv local. Cuando el 14 de agosto muchos vecinos se dispusieron a ver el pregón por la tv en lugar de ir a la plaza y aguantar a la marabunta de turistas lo que vieron no fue un pregón, fue un pollón... Yo personalmente no he vuelto a saber de él.
jajaja arual, la realidad sin duda supera a la ficcion!
Si es que las cámaras las carga el diablo... Alejado del mundo real y metido en el de ficción, tengo otra anécdota así. Años ha, una amiga de mi padre me pidió la copia que tenía en VHS grabada de la televisión de 'Memorias de África', porque su anciana madre no la había visto. Se la llevó, se la puso a su madre y se fue a hacer cosas en casa. Volvió al salón cuando escuchó los gritos de su madre. Resulta que grabé la película en Canal + un viernes por la noche y no estaba en casa para detener la grabación cuando finalizó la película. Ya sabéis lo que ponía Canal + en las madrugadas del viernes, ¿no...?
Qué buena. Me imagino que el Holmes del título será John y no Sherlock.
Dios mío, hace unos días me lo encontré, si lo sé, le pido un autógrafo.Alex, Holmes (John)es inimitable,en su calidad interpretativa claro.
Tengo una historia similar. En el secarral funcionó, durante una temporada, algo parecido a una televisión local. Su responsable tuvo a bien no retransmitir sus aficiones: le pillaron junto a una oveja con los pantalones bajados.
Slim, mi historia no es ficción.
Y sí, es John Holmes. El título también tiene su historia. En la Escuela teníamos un compañero a quien llamábamos Holmes por precisamente ese motivo. Mi amigo Carlospe y yo nos pasábamos la vida escribiendo por todas partes "Holmes vive".
He tenido que buscar quien era el tal Holmes. Por suerte las búsquedas no las hago directamente con imágenes, si no puede que hubiera traumatizado a mi hijo (o a mí directamente) que andaba por aquí...
Peor hubiera sido que en escena saliera Alejo con otra mujer... u hombre...
O con mujeres, hombres y animalitos.
Recuerdo una tarde en la que el topógrafo de mi obra, al no poder salir por la lluvia, se entretuvo viendo fotos en internet. Sobra decir qué tipo de fotos. Fue hace mucho tiempo y las conexiones de internet eran muy lentas así que cada foto tardaba un año en bajarse. El resto de la oficina nos asomábamos de vez en cuando para ver los avances y, en una de esas, pude ver a la novia de un buen amigo mostrando sus poderes en la red. Ojiplático me quedé. Por cierto, el tal Holmes debe ser uno de los seres más grimosos sobre la faz de la tierra.
Imagino la imagen de la madre queriendo impresionar al resto de mujeres con las monerías de su niño. Y de pronto el niño "vomitó"
Hombre, Holmes hace ya un porrón de años que murió. Y hablando de Holmes, me gustó bastante "Boogie nights" que no era un bio-pic pero bueno.
¿Y se casó con tu buen amigo? ¿Estuviste en su boda? ¿La has vuelto a ver? ¿Con qué ojos la miras? ¿Con qué ojos miras a tu buen amigo?
Por eso intento alejarme de las cámaras... no es tanto como lo que aquí cuentas, pero en mi propio móvil he visto grabaciones de mis amigos y yo haciendo cosas que tras verlas, en cualquier otra ocasión, la vergüenza se apodera de uno. Menos mal que sé que están a buen recaudo, vamos, que no las verá nadie (más, nadie más).
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