martes, 28 de julio de 2009

Trem das onze

Son historias pequeñas. Historias insignificantes. Tengo que marcharme, mi amor. No puedo quedarme. Tengo que coger este tren, el tren de las once. Es el último y si lo pierdo no podré volver hasta mañana por la mañana y mi madre se preocupará. Mi madre no duerme hasta que yo llego a casa. Soy hijo único ¿sabes? y tengo una casa que cuidar. No puedo quedarme más, mi amor.

Historias pequeñas. La historia de una canción que se escucha, que se queda en la memoria. Una canción sin título, sin autor. Melodía, letra. Una canción que se cuela, seduce, vive, enamora, obsesiona, pero siempre fugaz, siempre a punto de irse, una canción que puede volar, desparecer, fugarse, marcharse, desvanecerse y sólo dejar su recuerdo, su tarareo, su esencia. Algo que tienes pero no posees. Algo que tienes pero no es tuyo. Algo que no puedes mostrar, recomendar o presentar porque, realmente, no tienes. Hasta que un día, sin querer, aparece. Y viene con nombre. Se presenta. Y viene para quedarse. Viene para no irse nunca. Historias pequeñas. No me puedo quedar. Tengo que marcharme, mi amor. Tengo que coger este tren, el tren de las once.

10 comentarios:

Pascaligudum dijo...

Mais nao pode ser.

Pascaligudum dijo...

Adoniran Barbosa es el autor. Sin duda un filho único.


http://pt.wikipedia.org/wiki/Adoniran_Barbosa

Roman Abramovich dijo...

La verdadera razón por la que tiré a Scolari del Chelsea es porque descubrí que pasaba más tiempo tocando la pandereta que entrenando, y así no puede ser.

SisterBoy dijo...

Esta es una de mis canciones preferidas de trenes

http://www.goear.com/listen/6c5b48c/Midnight-Train-johnny-burnette

Y dile a Ujfalusi que no sea tan macarra

El Impenitente dijo...

Muy buena. No la conocía.

Yo, como soy melódico y sentimental, sobre trenes me quedo con ésta:

http://www.youtube.com/watch?v=v78-ftcqpNw

No sería una mala cadena maléfica de esas el hacer relación de tus diez canciones favoritas sobre trenes.

Si Ujfalusi no fuese tan macarra no jugaría en el Atleti. Es condición sinecuánime, como diría mi jefe. Estaba realmente guapo, con su camiseta negra de tirantes y sus brazos tatuados. Mi padre siempre decía que no entendía como Gárate era jugador del Atleti, que no dejaba de ser un señor rodeado de gañanes. Me temo que tenía razón.

Aunque tu amigo Ibrahimovic, cuando se quita la camiseta también parece un cromo. Hay más lectura en su cuerpo que en las obras completas de Aristóteles.

Slim dijo...

guapos en camiseta negra de tirantes y tatuados?
cuando aprenderas a poner fotos en el blog???? ;-)

El Impenitente dijo...

No he encontrado la foto ni el vídeo de su rueda de prensa.

Slim, tendrás que ver el final de las noticas de deportes, cuando ya por fin dejan de hablar del Madrid y del Barcelona.

Slim dijo...

ah! es que yo cuando empiezan con los entrenamientos del madrid cambio de canal.

me voy de vacaciones. hasta septiembre colega. que lo paseis bien.

3'14 dijo...

El encanto de los trenes... Es la forma de viajar que más me gusta.
En lugar de canciones, voy a citar algunas películas en las que dicho medio de transporte tiene protagonismo:

Tenemos románticas, desde la clásica "Breve encuentro" hasta "Enamorarse", ambas parecen, no sólo justificar en pro al amor el engaño y la indifelidad, si no que encima colocan al espectador del lado de los adulteros. Pero para romanticismos, la maravillosa "Antes del amanecer".
También hay viajes los cuales no sólo representan una traslación del cuerpo físico, si no que acompañan un viaje de crecimiento y evolución personal, como el de los tres hermanos de "Viaje a Darjeeling".
Y también hay historias en las que los trenes esconden conspiraciones, suspense e incluso crímenes, como "Extraños en el tren" o "Asesinato en el Orient express".

Hay muchas más películas en las que aparecen trenes, pero estas son las que a la primera me han venido a la mente.

Respecto a la cancioncita en cuestión... ya es ser cutre poner como excusa no poder perder el tren por tener que ir a casa a dormir con mamá...

Y en cuanto a la vida real... coger un tren a veces, con mayor frecuencia si se trata de la línea ferroviaria española, puede convertirse en un verdadero calvario: Los atrasos, la falta de asientos, los precios, el calor o el exceso de frío por un aire acondicionado no regulado correctamente, el olor de algunos pasajeros, el ruido (¿Porqué hay gente que se cree en el derecho de usurpar el anhelado silencio a los demás con sus politonos de reggaeton?), por no hablar de las conversaciones con un exceso de decibelios superior al establecido por la oms, son aspectos con los que hay que convivir y estos, no se ven reflejados en el cine.

El Impenitente dijo...

Hombre, es hijo único y su madre no duerme hasta que él llega. Confiemos en que 3`15 piense también en su madre y en no disgustarla demasiado.

Sólo he visto "Extraños en el tren". Y ahora no me viene ninguna a la cabeza. Quizá la partida de póker en el tren de "El golpe".

Tengo unos cuantos viajes en tren a mis espaldas en el expreso, viajando toda la noche. No existía entonces ni el reggetón ni los politonos. Recuerdo a un hombre que no paraba de hablar, muy preocupado por su hijo pues a los quince años todavía era virgen. Pensaba llevárselo de putas pues había cosas que no se podían consentir.