Pasé corriendo junto a Viveros y escuché lo que parecía una prueba de sonido. Era una prueba de sonido. Había concierto aquella noche en Viveros. “Rock and roll star”. Qué bien imita ese tío a Loquillo. No lo imita. Es Loquillo. Ese tío que canta es Loquillo. Vaya. A la mañana siguiente, en el trabajo, pregunté: ¿puede ser que anoche actuase Loquillo en Viveros?
-No lo sé. La verdad es que no sé quién es Loquillo.
-Yo tampoco lo sé.
La radio siempre puesta. Siempre pasando de una emisora a otra. Siempre radio fórmula. De repente, no sé de dónde, los Beatles. “Come together”. Here come old flattop, he come. Grooving up slowly, he got. Y ahí se acabó. Cambiaron de emisora.
Gran representación laboral para impresionar a un posible y poderoso futuro cliente. Derroche de actividad que hizo que aquello pareciese un hormiguero cuando sonó la señal convenida. -¿No os recuerda todo esto a “El golpe”? -¿”El golpe”? –Sí, “El golpe”. Una película. ¿No la habéis visto? –No.
No la habían visto. Ni siquiera habían oído hablar de ella.
El Golpe, Loquillo.
ResponderEliminarSomos de otra época.
Te entiendo perfectamente. Y si cuento historias de la puta mili se rien de mi en la faena.
Te sigo.
No estás solo, hombre.
ResponderEliminarY si les canto aquello de "Quiero bailar rock and roll" de Cucharada-Manolo Tena-Siniestro Total -no me preocupa la escultura y mucho menos la cultura- sentiré que si lo hubiese cantado en ruso habría tenido el mismo efecto.
ResponderEliminarY solo no estoy. Pero soy el raro. Viejo y raro. Cojonudo.
Intenta decirle a todo aquel que veas con una camisa de Los Ramones si sabe que Tommy ha muerto
ResponderEliminarLo intentaré. Y no me sorprendería que primero comprobasen en su camiseta si algún Ramone se llamaba Tommy.
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